La Ley de Estadounidenses con Discapacidades tiene una definición amplia de perros de servicio: cualquier perro que realiza un servicio para alguien, ya sea el dueño del perro o una persona discapacitada a quien una organización que los cría y entrena le ha otorgado un perro. Los perros de servicio ayudan a las personas con muchas discapacidades.
Tipos de servicios
Los perros se pusieron en servicio por primera vez para ayudar a los veteranos ciegos después de la Primera Guerra Mundial; primero perros pastores alemanes, luego golden retrievers y labradores fueron entrenados como perros lazarillos. Otros programas comenzaron a surgir para enseñar a los perros a alertar a los sordos sobre los sonidos. Más tarde, se incorporaron perros para ayudar a los discapacitados en la vida diaria realizando actos que la persona no podía, como recoger un juego de llaves caídas o abrir una puerta. Todos estos perros compartían varias características: inteligencia, fuerza, voluntad de aprender y ganas de agradar.
Tipos de perros
En 2011, la ADA revisó su definición de perro de servicio para incluir no solo a los perros que ayudaban a personas con discapacidades obvias, sino también a aquellos con discapacidades invisibles, como trastornos convulsivos, trastornos por estrés postraumático o arritmias cardíacas. Para que los perros de servicio sean eficaces, además de inteligencia y simpatía, también deben ser muy intuitivos. Esto es fundamental para su función como perro de servicio. Los cambios eléctricos menores en el corazón o el cerebro son imposibles de detectar para los humanos sin una máquina, pero algunos perros pueden detectar estos impulsos y advertir al paciente con suficiente antelación para ponerse un casco o tomar una pastilla. Si bien la fuerza física puede ser imperativa para los perros que realizan servicios que implican tirar de una silla de ruedas o ayudar a una persona que se ha caído, los perros pequeños son capaces de la intensidad de concentración necesaria para ayudar a alguien con un problema invisible.
Características del temperamento
La ADA otorgó a las personas con discapacidades algunas libertades y libertades ganadas con esfuerzo. Como estadounidenses, siempre tuvieron derecho a moverse libremente, pero cuando la presencia de un perro es necesaria para la movilidad, surgen algunos problemas debido a prejuicios, alergias, leyes de salud y preferencias. Los propietarios de restaurantes, tiendas minoristas, hoteles y otros lugares públicos tardaron en adoptar la ley. Muchos fueron demandados con éxito porque no permitían que un perro de servicio entrara en su establecimiento. La ley revisada abordó este problema al ordenar que un perro de servicio se mantenga bajo control en todo momento, que no ladre ni cause molestias a quienes lo rodean y que esté sujeto a una correa a menos que interfiera con su trabajo. Las características requeridas de los perros de servicio según la ley incluyen buen comportamiento, disciplina, entrenamiento y aceptación de extraños. Si molestan o gruñen a extraños, deben ser retirados de las instalaciones.
Aseo y entrenamiento
Además de un comportamiento ejemplar, los perros de servicio deben estar bien cuidados y libres de parásitos internos y externos. Los perros de pelo grueso deben cepillarse a diario para evitar dejar pelo para que otros lo limpien. Los perros de servicio deben estar adiestrados de manera completa y confiable. No deben mendigar comida ni recoger comida que se haya caído al suelo. Está en la naturaleza de un perro estar alerta y este instinto debe eliminarse mediante la socialización y el entrenamiento. En caso de una emergencia, los socorristas deben poder ayudar a la persona discapacitada sin la interferencia de un perro protector.
