Aunque los bettas a menudo se comercializan como mascotas sin mantenimiento o como decoración, requieren un cuidado atento y agua limpia como todos los demás peces. La enfermedad de Popeye se llama así por su tendencia a hacer que los ojos se salgan de la cabeza y suele ser el resultado de una mala crianza.
Acerca de la enfermedad de Popeye
La enfermedad de Popeye hace que uno o ambos ojos se inflamen de manera grotesca. Puede parecer que el ojo está saliendo de la cabeza. Con el cuidado adecuado, su pez betta puede recuperarse por completo, por lo que si nota síntomas de la enfermedad de popeye, consulte a un veterinario de inmediato. Si no se trata, la enfermedad puede provocar una infección masiva y una muerte dolorosa.
Causas de la enfermedad de Popeye
La enfermedad de Popeye generalmente es causada por una infección bacteriana en el ojo. La causa más común de estas infecciones es el agua sucia. Los bettas se venden a menudo en recipientes pequeños que rápidamente se ensucian y se infectan con bacterias. Pueden transmitir la infección a otros bettas. Sin embargo, ocasionalmente, la tuberculosis y otras afecciones médicas graves pueden causar popeye. En estos casos, popeye es más difícil de tratar.
Tratamiento de la enfermedad de Popeye
Debido a que el popeye es causado por una infección bacteriana, es posible que su pez beta necesite un tratamiento con antibióticos para recuperarse de la enfermedad. Su veterinario le hará preguntas sobre el hábitat de su pez y determinará si el popeye es el resultado de una infección bacteriana en el ojo o una condición médica subyacente más grave. Debido a que a menudo es difícil encontrar un veterinario de peces calificado, es posible que deba intentar tratar la infección usted mismo. Administre un tratamiento con antibióticos directamente al agua, siguiendo cuidadosamente las instrucciones del paquete.
Prevención de la enfermedad de Popeye
Ponga en cuarentena a los peces nuevos lejos de otros peces durante al menos siete días para evitar la propagación de infecciones bacterianas. También es de vital importancia mantener limpia el agua de su pez beta. Los bettas necesitan, como mínimo, un galón de agua por pez. Cambie el agua semanalmente y asegúrese de que su mascota tenga suficiente oxígeno agregando una piedra de aire o una planta viva. Para tanques más grandes, use un filtro de agua y cambie el cartucho del filtro de acuerdo con las instrucciones del paquete o mensualmente.
