La cara de un gato persa, con sus ojos muy abiertos y cabello largo, es propensa a lagrimear y manchar. Una vez que lo domines, solo te tomará unos minutos lavar la cara de tu gato.
Paso 1
Agregue un poco de champú para bebés en un recipiente con agua tibia. Apunta a un 20% de champú para bebés y un 80% de agua. Mezclar el champú con agua antes de aplicarlo en la cara de tu gato facilita el enjuague.
Paso 2
Sumerja un paño en el lavabo y luego exprima el exceso de agua. El paño debe estar húmedo, pero no mojado.
Paso 3
Limpia la cara de tu gato, yendo en la dirección del crecimiento del pelo. Tenga especial cuidado alrededor de los ojos y la nariz. Tómese su tiempo y asegúrese de meterse en las grietas alrededor de sus labios.
Paso 4
Frote suavemente el área alrededor de los ojos y la nariz de su gato con un cepillo de dientes suave para bebés.
Paso 5
Enjuague la cara de su gato frotando su mano mojada en su pelaje. Frote con la dirección del crecimiento del cabello y vuelva a humedecer la mano con frecuencia. Límpiese los ojos y la nariz para que no le entre jabón en los ojos o la nariz sin darse cuenta.
Paso 6
Seque la cara de su gato con una toalla limpia. No frotes, lo que puede hacer que el pelaje se enrede e irrita a tu gato.