¿Cómo las madres muestran afecto a los cachorros?

Pin
Send
Share
Send

Pocas cosas en la vida son tan reconfortantes como ver a una perra interactuar con sus cachorros. Algunos lo llaman "instinto", pero los amantes de los perros lo saben mejor.

Un vínculo desde el nacimiento

A medida que cada cachorro entra, su madre atiende cuidadosamente sus primeras necesidades: lamer y limpiar a su recién nacido para estimular la respiración y estimular la lactancia. Mientras sus cachorros recién nacidos amasan y maman, ella enrolla su cuerpo alrededor de ellos en busca de protección y calor; los corazones laten al unísono. Cada lamido, que es un beso de perro, refuerza el vínculo madre-cachorro.

Cuidar y Proteger

Una madre perra lloriquea para alertar a sus humanos si la separan de sus cachorros. Camina nerviosamente de un lado a otro entre un pequeño cachorro que aún no ve que se desliza hacia el otro lado de la habitación y el resto de su camada. Cuando sea necesario, una madre perro se pondrá entre sus cachorros y el peligro. No deja que se acerquen perros extraños, y si siente que un humano podría dañar a sus pequeños, emite un gruñido de advertencia.

Abrazos y diversión

Una madre perro acaricia a sus cachorros, colocando su cara cerca o tumbada muy quieta cuando uno de sus pequeños se menea en el hueco de su cuello para tomar una siesta. A medida que su descendencia crezca, seguirá buscando su compañía, y no es raro encontrar una perra y cachorros destetados todavía acurrucados. Los perros sonríen con la cola. Durante el tiempo de juego y al saludar a sus cachorros, una perra mueve la cola para mostrar su afecto y felicidad.

Pequeñas lecciones de la vida

Como cualquier madre con hijos que se portan mal, una madre perro le ladrará a sus cachorros revoltosos si juegan con demasiada brusquedad. El amor de una madre perra por sus cachorros se extiende a su educación. En la naturaleza, una perra cazará y traerá comida a casa para sus crías. Las perras madres domesticadas no tienen que cazar, pero llevarán un preciado juguete para masticar o un animal de peluche al área de la guardería y lo dejarán donde sus crías puedan disfrutarlo.

El corazón de una madre

Cuando los cachorros alcanzan las ocho semanas de edad y se van a sus nuevos hogares, su madre, que se siente perdida sin su camada, puede mostrar signos de depresión. Podría buscar a sus bebés desaparecidos, pidiendo a sus dueños que la ayuden. En unos días, se animará y, si tiene otra camada, los amará y cuidará tanto como lo hizo con su última camada.

Pin
Send
Share
Send

Ver el vídeo: Primera noche de un cachorro en casa (Mayo 2024).

uci-kharkiv-org